La madera de exterior requiere de unos cuidados y tratamientos específicos para que su aspecto se mantenga como el primer día, ya que su localización hace que sea más susceptibles de deterioro debido a los factores climatológicos. En Maderas Besteiro te vamos a contar algunos de los detalles que necesitas saber.
En primer lugar, vamos a mencionar algunos aspectos clave a tener en cuenta:
La durabilidad natural es la resistencia intrínseca de la madera a los ataques de los siguientes organismos destructores: hongos xilófagos, insectos de ciclo larvario, termitas, xilófagos marinos.
Es difícil establecer un criterio definitivo sobre la durabilidad natural de la madera, debido a que esta depende de diversos factores como son la especie, si se trata de duramen o albura, tipo de exposición, etc.
Sin embargo, a través de ensayos realizados, la norma UNE EN 350-2:1995 facilita información sobre la durabilidad de la albura y del duramen frente a algunos agentes degradantes para una serie de especies de madera.
La norma UNE EN 350-2:1995 también establece una clasificación para la impregnabilidad de la madera, definida como la capacidad que presenta una especie de madera a la penetración de un líquido.
Impregnable: Muy fácil de impregnar, la madera aserrada puede ser impregnada totalmente con tratamiento a presión sin dificultad.
Medianamente impregnable: Fácil de impregnar. Normalmente no es posible una impregnación completa, pero después de 2 o 3 h de tratamiento a presión se puede alcanzar una penetración de más de 6 mm en las coníferas. En las frondosas se puede conseguir impregnación en una proporción grande de los vasos.
Poco impregnable: Difícil de impregnar. Después de 3 o 4 horas de tratamiento bajo presión se alcanzan solo penetraciones de 3 a 6 mm.
No impregnable: Prácticamente imposible de impregnar. Después de 3 o 4 horas de tratamiento bajo presión solo absorben pequeñas cantidades de producto. Penetraciones longitudinales y laterales mínimas.
En cuanto a la protección preventiva de la madera existen diferentes tratamientos.
Hay especies que dada su durabilidad natural no pueden ser tratadas con ningún tratamiento protector, pero hay otras que necesitan ser tratadas para incrementar de esta forma su durabilidad y prevenir el ataque de agentes degradantes, esto es lo que se conoce como protección preventiva.
Es fundamental una correcta instalación en la obra del producto teniendo en cuenta una serie de consideraciones de carácter preventivo:
Finalmente, hay que realizar una selección de un producto protector adecuado. Es necesario tener en cuenta la durabilidad natural e impregnabilidad de las especies, las clases de uso y si es necesario tratamiento protector según las especificaciones en función de las clases de uso.
En el caso de que se prescriba necesario algún producto protector hay que elegirlo teniendo en cuenta, además de lo que mencionábamos anteriormente, los requisitos de prestaciones que establece la norma UNE EN 599-1: 1997 y en la UNE EN 599-2: 1996.
Además, es importante conoces los tipos de tratamientos preventivos. Se diferencia entre: Productos decorativos para la protección superficial y protectores de la madera.
Productos decorativos para la protección superficial: protegen a la madera de exterior frente a los agentes atmosféricos como son el sol y la lluvia y frente a los cambios de humedad.
Protectores de la madera: Realizados con compuestos químicos, aportan a la madera una mayor resistencia frente a los agentes bióticos.
Esperamos que toda la información que te hemos aportado acerca de los cuidados de la madera de exterior te sirva de ayuda y si necesitas algún dato más puedes ponerte en contacto con nosotros en el teléfono 982 284 455 o en el mail correo@mbesteiro.com. ¡Estaremos encantados de ayudarte y asesorarte!